Declaraciones que buscan desestabilizar

13/09/2014

Tiempo Argentino | Opinión

Luego del impacto generado por sus declaraciones, Luis Barrionuevo intentó desmarcarse y comentó que lo "tergiversaron" cuando expresó que la Argentina "va a estallar" en diciembre. No es en absoluto un repliegue de sus dichos, sino una estrategia muy estudiada, tirando frases perturbadoras que envían un claro mensaje desestabilizador, para luego evitar quedar pegado con semejantes provocaciones. La frase la inició con "no es que uno meta más miedo" dejando bien a las claras el objetivo de sus palabras.

Por Carlos Heller

Luego del impacto generado por sus declaraciones, Luis Barrionuevo intentó desmarcarse y comentó que lo "tergiversaron" cuando expresó que la Argentina "va a estallar" en diciembre. No es en absoluto un repliegue de sus dichos, sino una estrategia muy estudiada, tirando frases perturbadoras que envían un claro mensaje desestabilizador, para luego evitar quedar pegado con semejantes provocaciones. La frase la inició con "no es que uno meta más miedo" dejando bien a las claras el objetivo de sus palabras.

Un indicio de la efectividad de sus dichos es que fueron recogidas por "Momo" Venegas, el líder de UATRE, el gremio que enrola a los peones rurales. El dirigente dijo: "No sé si estallido es la palabra, pero la gente cuando llegan las Fiestas, sabemos lo que pasa", intentando evidenciar que hacia Fin de Año crece la conflictividad social, cuando la situación de la sociedad está muy lejos de ser conflictiva, y los sucesos de violencia que se han dado en diciembre de los últimos años han sido fomentados por grupos minúsculos sin ningún apoyo popular.

Dado que no consiguen adhesiones verdaderas de la población a sus ideas y posturas, quieren instalar mediáticamente una sensación de caos y una conflictividad que no existe.

No son posturas aisladas, son alfiles de un proceso que, si bien participa de la "cadena de desánimo" que citó la presidenta Cristina Fernández, va mucho más allá, intentando generar condiciones de convulsión social con un claro objetivo destituyente.

Trabajan afanosamente para que nuestro país vuelva al neoliberalismo de los noventa, que ellos y muchos otros apoyaron con fervor.

No les gusta este gobierno nacional y popular, porque saben que no tienen chance alguna de conseguir legitimación, mas allá de la que le dan los medios concentrados. Quieren a los trabajadores arrodillados por el desempleo y los bajos salarios, para poder reinar con algunas migajas que les tiren. Lo han hecho en los noventa, y sueñan con volver a hacerlo. Por suerte, creo que la cohesión del pueblo argentino los mantendrá cercados como hasta ahora.