Entrevista a Carlos Heller

22/06/2010

1.¿Cómo se inscribe este proyecto de Ley de Entidades Financieras en un contexto mundial marcado por la crisis, en el que ni siquiera las mayores potencias son capaces de regular eficazmente las operaciones de los bancos y de los grandes especuladores?

Si bien la presentación del proyecto de Ley de Servicios Financieros coincide con momentos de fuertes turbulencias financieras internacionales, excede a la actual coyuntura. Se trata de un reclamo histórico del movimiento cooperativo de crédito pensado para revertir problemas medulares de un sistema financiero que funciona desde hace décadas bajo los parámetros del enfoque neoliberal, que sostiene que el mercado es el mejor asignador de los recursos. Las crisis recientes tienen una estrecha relación con la desregulación casi irrestricta de las operaciones financieras a escala doméstica e internacional. La crisis evidenció la fragilidad de los sistemas financieros, que privilegian la especulación por sobre las aplicaciones en actividades vinculadas a la economía real. La actual crisis nos deja como enseñanza, una vez más, que se debe regular el funcionamiento de los sistemas financieros con otra visión y objetivos, y es aquí donde se refuerza la pertinencia de nuestro proyecto.

2. Si observamos la evolución de la crisis mundial en las últimas tres décadas, se verifica que: a) se han ido acercando desde la periferia al centro del sistema, donde están ahora; b) los tiempos entre una y otra son cada vez más cortos y; c) su gravedad es cada vez mayor. En la última crisis, los gobiernos han inyectado sumas colosales en el sistema financiero para salvarlo, pero no se han dispuesto regulaciones internacionales significativas y ni siquiera se ha considerado el tema de los paraísos fiscales, donde se encuentra el dinero negro, de todo tipo de evasión y delito. La deuda pasó del sistema privado al público, pero los especuladores siguen haciendo temblar a los Estados, como vemos ahora mismo en Europa. Los bancos aumentan sus ganancias y los Estados van a la quiebra. ¿Qué habría que hacer con los paraísos fiscales? ¿Qué tipo de regulaciones internacionales deberían implementarse para impedir que la economía de los países quede en mano de los grandes especuladores internacionales?

La principal dificultad a sortear para regular adecuadamente las transacciones financieras es de naturaleza política. Una muestra de ello son los escasos avances observados en ámbitos multilaterales como el G20, a pesar de observarse cierto reconocimiento de la importancia de estos temas. Si bien se lograron algunos avances en el caso de los paraísos fiscales, su mera existencia denota la tolerancia que existe en este campo. Otra muestra de ello son las dificultades para re-regular el sistema financiero internacional. La situación es compleja por la resistencia del propio capital financiero, que se opone a este tipo de medidas. Un esquema de control y monitoreo global de los movimientos de capitales especulativos, en el que se vean implicadas las principales potencias, resulta necesario como forma de minimizar la gestación de burbujas de activos y grandes movimientos de capitales desestabilizadores, pero también para incrementar los grados de libertad de la política económica de los países más pequeños.

3) La recurrente crisis financiera internacional, no expresa acaso algo más grave y profundo, una crisis del sistema productivo, de la demanda, a causa de la mayor productividad y de la simultánea destrucción de puestos de trabajo y el deterioro del salario real?

La crisis financiera reciente se generó por niveles de apalancamiento excesivo, favorecidos por un contexto de desregulación financiera extrema. No obstante, los cambios observados en la esfera real, básicamente la deslocalización de los procesos de producción a nivel global, han generado un dislocamiento espacial entre quienes producen los bienes y los principales centros de consumo. El tema es en extremo complejo y roza también otras cuestiones, como las laborales, las comerciales, etc. El ejemplo más evidente es Estados Unidos, un fuerte importador de los bienes que consume, que ha debido compensar el menor ingreso generado localmente por la vía de un fenomenal endeudamiento, como única forma de aumentar la inversión y el consumo y evitar así la caída de su nivel de vida y actividad. Este es un caso concreto de vínculos entre lo real y lo financiero.

4) Si bien la Argentina ya no es Grecia, sigue siendo una nación periférica. ¿Que amenazas se ciernen sobre el país en medio de semejante conmoción mundial? ¿Podrá venir algo peor de lo que ya hemos visto? Y en ese caso, ¿cómo respondería la banca privada local, ya sea de capitales nativos o extranjeros?

El impacto va a estar relacionado necesariamente con la magnitud de la crisis que eventualmente se avecine. Pero puede analizarse a la luz de lo sucedido en 2008 y 2009, y cómo repercutió la crisis internacional en nuestro país. El principal impacto (además de la grave sequía que debió enfrentarse) estuvo dado por la vía del comercio exterior y de las expectativas, y se utilizaron fuertes políticas anticíclicas para disminuir el potencial perjuicio de la crisis internacional sobre la economía argentina. La recuperación ha sido muy rápida, puesto que los fundamentos de la economía argentina son sólidos, el nivel de demanda se mantuvo sostenido, y por lo tanto la producción en general

También debe tenerse en cuenta que nuestras exportaciones están diversificadas, con un porcentaje importante hacia países periféricos, que han mostrado un mejor desempeño que el mundo desarrollado, y por lo tanto el impacto de la crisis europea tendrá importantes amortiguadores. En 2009, el 21% de nuestras exportaciones se destinó a Brasil, el 42% a países en desarrollo y periféricos, el 7% a China y el 30% a países centrales. Respecto al sistema financiero, no alterará significativamente su funcionamiento, a lo sumo generará una desaceleración en el crecimiento de los préstamos. Puede impactar en los valores del mercado de capitales, como ya lo está haciendo, dado que éste se encuentra estrechamente relacionado con la volatilidad de los mercados mundiales.

5) Y entrando en el análisis de su proyecto, ¿qué elementos incorporaría la nueva ley a la vida de las entidades financieras en el país?

El Proyecto de Ley de Servicios Financieros para el Desarrollo Económico y Social, presentado por los diputados del Bloque Nuevo Encuentro Popular y Solidario, que integro, cambia conceptualmente el espíritu de la ley de entidades financieras de la dictadura. Se pasa de una ley para bancos, a una ley pensada en los usuarios de los servicios financieros, colocando el interés de la sociedad por sobre el del mercado. El proyecto se estructura en dos enfoques principales: la definición de la actividad financiera como servicio público, y ser un una ley concebida a partir de las necesidades de los usuarios.

Nuestro proyecto de ley implementa regulaciones más estrictas que las actuales, como por ejemplo establecer un listado taxativo de operaciones para los bancos comerciales, abandonando el criterio actual de admitir toda operatoria que no se encuentre expresamente prohibida. Para los bancos de capital extranjero se incorporan criterios más restrictivos para su actuación en el sistema financiero nacional.

Se otorga al Poder Ejecutivo Nacional la facultad de autorización para el funcionamiento de nuevas entidades de capital extranjero. También se determina que ninguna entidad financiera privada podrá tener una participación de mercado superior al 8 %, tanto en el total de depósitos como de préstamos del sector privado.

El proyecto de ley instaura un fuerte fomento a la actividad financiera en las localidades de menor desarrollo relativo del interior del país, ya que exige tener en cuenta en las diferentes regulaciones del BCRA las características económicas y sociales de los sectores y regiones atendidos.

Otro de los conceptos que no son novedosos pero que cambian significativamente en enfoque actual, es incorporar algunas medidas de orientación del crédito que los bancos deberán aplicar.

6) ¿Tendrían entonces los usuarios más posibilidades de defensa frente al poder casi omnímodo de los bancos?

Es la intención del proyecto. Se encomienda al Banco Central definir un listado de “Servicios Esenciales” que las entidades deberán ofrecer dirigidos hacia los sectores de menores ingresos de la población, para los que se fijarán pautas operativas determinadas y un nivel acotado de comisiones, y en algunos casos sin comisiones.

El proyecto de ley contiene un título dedicado a la Protección del Usuario Financiero, por el cual se obliga a las entidades a dar tratamiento y resolver los reclamos que presenten sus usuarios, a través de un Departamento de Atención a Usuarios. Se crea la Defensoría del Usuario de Servicios Financieros en el ámbito del Banco Central, cuya misión consiste en la defensa y protección de los intereses de los usuarios financieros frente a las entidades financieras, constituyéndose en una segunda instancia de reclamos. Por último, se encomienda al Banco Central implementar un Código de Conducta de las entidades financieras.

7) Si su proyecto se conviertiera en ley, ¿podría un futuro gobierno volver a disponer un corralito que confisque los ahorros de la población?

El tema del corralito no estuvo ligado a la normativa financiera, que es lo que este proyecto de ley está modificando. Al corralito se llegó por la insostenible Ley de Convertibilidad, y la gran dolarización de los activos y pasivos financieros. El tipo de cambio fijo no era sostenible, había deflación y recesión, y por lo tanto una importante mora en el sistema. El Banco Central puede ser prestamista de última instancia de los depósitos en pesos, pero no de los depósitos en dólares. Para fortalecer al sistema financiero ante estas situaciones, nuestro proyecto establece que los préstamos en dólares deben asignarse en el 90% a actores con ingresos en esa moneda. También prevemos un Seguro de Garantía de los Depósitos con garantía estatal, es la Nación la que responde si no alcanzan los fondos acumulados en el BCRA para ese propósito.

8) ¿Cómo impactaría la nueva ley financiera en la vida de las micros y medianas empresas y en las cooperativas?

Las entidades financieras deberán destinar a las Mipymes, directa o indirectamente, no menos de un 38% del total de sus financiaciones al sector privado y un 2% a micro emprendimientos. En la medida que determinados bancos no deseen prestarle a pymes, podrán cumplir con la normativa a través de otros bancos públicos y privados especializados en estos segmentos.

También se establece una tasa de interés máxima para préstamos a micro y pequeñas empresas, ques no podrá superar en una proporción del 5% a una tasa promedio del sistema financiero para ese segmento; similar metodología se aplicará a los préstamos personales inferiores a los $ 100.000.

Con estas medidas, las micro, pequeñas y medianas empresas, y las cooperativas que en su mayoría se inscriben en este agrupamiento, tendrán acceso a un mayor volumen de financiamiento y a tasas más accesibles. Hay que tener en cuenta que esta normativa no exige que estos préstamos sean a largo plazo, una modalidad que sólo puede ser atendida en una pequeña proporción, dado que la fuente financiera para otorgar estos créditos, los depósitos de los particulares, son de cortísimo plazo. Por ello resulta necesario un Banco Público de Desarrollo, que tenga acceso a recursos a largo plazo y que los aplique a préstamos para inversiones de pymes.

Este cupo que propone el proyecto de ley de servicios financieros puede cumplirse totalmente hoy día, y sólo exige que el sistema bancario dedique poco más de un tercio de la liquidez que tiene invertida en letras y notas del Banco Central.

9) ¿Puede una ley obligar a la banca privada --nacional y extranjera-- a prestarle recursos a las empresas industriales y a prefinanciar exportaciones de las pymes, por ejemplo, y en ambos casos a una tasa de interés predeterminada por la autoridad monetaria?

Nuestro proyecto establece relaciones macroeconómicas de direccionamiento del crédito, como expliqué anteriormente, un banco puede decidir no prestar a pymes e invertir ese dinero en otra entidad que los aplique a ese destino. En el caso de las tasas máximas, son tasas promedio del mercado y no son arbitrariamente fijadas por el BCRA. Pero es posible aplicar regulaciones como las que propone la pregunta, que pueden establecerse por ley con un criterio amplio, y luego le corresponderá a la autoridad de aplicación, el Banco Central, determinar los porcentajes y tasas de cada momento de forma tal de mantener el necesario equilibrio de activos y pasivos, solvencia, rentabilidad y liquidez de las entidades.

Le Mond Diplomatique