Una vez más en las calles

25/03/2019

El cuarto 24 de Marzo con Macri en la Presidencia de la Nación tuvo su impronta: una monumental movilización que incorporó gente que fue por primera vez a una manifestación por Memoria, Verdad y Justicia. 
En la Ciudad de Buenos Aires, gente de a pie, artistas del pueblo, militantes sociales, estudiantiles, políticos y sindicales, salieron en arco multicolor a ganar todo el microcentro, desde la avenida 9 de Julio y todos los puntos cardinales. 
Cuatro generaciones de argentinas y argentinos, de hermanas y hermanos latinoamericanos que en nutridas columnas marcharon y llenaron densamente la histórica Plaza de Mayo para recibir en un abrazo interminable a las Madres y a las Abuelas, símbolos y emblemas universales de la lucha por los Derechos Humanos.
Una vez más estuvimos en las calles para recordar que en nuestro país se pretendió terminar con las organizaciones sindicales y con los partidos nacionales y populares para reformular una Argentina con lugar digno para muy pocos.
Este 24 nos encontró redoblando la lucha, enfrentando un neonegacionismo que intenta desestimar los crímenes de la dictadura, a la vez que pretende la impunidad, y resistiendo el atropello a la mayoría de los derechos del conjunto de la ciudadanía. Lo decimos siempre: en todas las épocas, la planificación de la miseria incluye represión. 
La acumulación de políticas antipopulares, las persecuciones pseudojudiciales, la aplicación de servicios de inteligencia al espionaje interno, hechos represivos selectivos y violentos, y un régimen económico inhumano, entreguista y claudicante frente a intereses foráneos, están rompiendo los diques que pretenden ocultar la angustiosa realidad que embarga a todo el país. Parece que el sofisticado blindaje mediático del gobierno nacional empieza a ser insuficiente para ocultar la realidad de este presente. Esto se expresó en el 43° aniversario del fatídico Golpe de Estado del 24 de marzo de 1976.
Inclusive, los empresarios nacionales pidieron un “Nunca Más económico”. Es que una vez más, los grupos privilegiados del poder pretenden imponerle a todo un país –antes fue a sangre y fuego, y ahora mediante los engaños flagrantes de Macri- un despojo metódico.
Nosotros también, con nuestra voz en franco crecimiento y con una multitud de compañeras y compañeros sosteniendo nuestras banderas solidarias, decimos que las compañeras y los compañeros detenidos-desaparecidos fueron 30.000, que no hay olvido ni perdón, y que estamos de pie para marchar unidos junto a todo el campo nacional y popular hasta dejar atrás este régimen de hambre y destrucción, para volver al camino virtuoso y posible del crecimiento con inclusión en una patria grande e integrada que garantice la paz, la independencia y la justicia.